Lumbalgia Crónica Albacete
Te han dicho que tienes una hernia, un desgaste, una rectificación… pero ¿por qué hay gente con lo mismo que no siente dolor? Porque el problema no siempre es la estructura, sino la cantidad de compensaciones que está asumiendo tu columna.
Si tienes un dolor crónico en cervicales o lumbares y no ha desaparecido por mucas terapias que has hecho a lo largo de los años, detente un momento y responde mentalmente las siguientes preguntas:
¿Tienes cicatrices en bajo vientre, cuello o mama?
¿Te fuerzas a rectificar la espalda cuando estás sentado creyendo que es positiva la higiene postural que nos inculcaron en los años 90?
¿Sufres de estreñimiento?
¿Fumas?
¿Bebes agua con sales minerales añadidas a diario?
¿Eres una persona con mucho estrés y preocupaciones?
¿Has tenido algún accidente de coche en el pasado con su respectivo latigazo cervical?
¿Has tenido alguna caída de culo fuerte en el pasado?
¿Te suele molestar o irritar la luz artificial?
¿Respiras por la nariz o por la boca?
Y así podríamos seguir hasta hacerte más de 100 preguntas relacionadas con factores MUCHO más importantes que el estado de tu estructura en sí.
El dolor lumbar es un quebradero de cabeza para la ciencia y más que soluciones, solo nos explican la gravedad de la situación haciendo metamodelos completísimos como este
¿QUÉ PODEMOS HACER POR TI?
El primer paso siempre será hacer un análisis completo de tus antecedentes y cruzar tu historia con tu prueba de imagen más relevante.
Si tu prueba de imagen no concuerda con tus antecedentes, pasamos a comprobar cuantos compensadores hay en tu espalda.
Que si un cuadrado lumbar que no se puede relajar...
Que si una musculatura flexora profunda del cuello que está inhibida...
que si un estímulo sobre tu cicatriz de la cesárea nos cambia toda la función motora de la espalda....
Los compensadores ya nos empiezan a dar muchas mas información relacionada con tu dolor. Empezamos a ver que cara/caras tiene tu dolor crónico.
Entonces llega el momento de encontrar la raíz del problema que ha generado todas tus compensaciones y descubrimos que el cerebro está protegiendo tu cesárea inhibiendo tu abdomen por completo y rectificando varios músculos erectores de la espalda. Además tienes un alto grado de fotosensibilidad y cada vez que entra luz artificial en tus ojos, tus cervicales se tensan sin saber que está pasando. Por último pasas 7 horas sentada en tu trabajo intentando forzarte a poner la espalda recta por la falsa creencia de la higiene postural.
Sin tu saberlo, la pantalla de tu ordenador, tu puesto de trabajo y hasta la placa led que tienes encima llevan años alimentando tu dolor de espalda.
Y para mas inri, te acaban de dar la contundente noticia de que tienes una protusión y una leve escoliosis. Te acaban de crear un trauma de miedo a mover tu espalda con normalidad que solo te hundirá más en el pozo. Pero esto tú, todavía no lo sabes.
NUESTRO ATAJO
En Atomía tenemos 10 años de experiencia abordando todo tipo de espaldas, con lesiones y sin lesiones, tanto de deportistas de alto rendimiento como de oficinistas de élite.
Agenda tu primera cita para encontrar cuanto antes el/los orígenes reales de tus dolores de espalda.
Tu columna no necesita más descanso, ni más pastillas, ni más resignación. Necesita solucionar sus compensadores, salir del estado de alerta constante y recuperar su función natural.
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